Tal como estaba previsto, ayer se intentó realizar la sesión especial en la legislatura, si bien estuvieron los legisladores, el problema se dio por un problema de interpretación técnica. Este nuevo entredicho se suma a la ya cuestionada suspensión de la sesión ordinaria que estaba prevista con anterioridad.
La sesión especial fue convocada por legisladores de la oposición que buscaban dar tratamiento a 19 iniciativas, de las cuales 17 eran pedidos de informes, muchos sin estado parlamentario.
En la semana se dieron varios cruces entre los Parlamentarios ya que la mayoría consideraba que no era necesario convocar a una sesión especial porque los temas no lo ameritaban.
Quienes la habían convocado sostenían que si era necesario teniendo en cuenta que la Legislatura no sesionaba desde el mes de junio y que había temas que necesitaban se tratados.
La suspensión de la Sesión se dio porque el legislador Damián Löffler, quien se encuentra a cargo del Poder Ejecutivo, debido a la ausencia de gobernador y la licencia que usufructúa la vicegobernadora, considero que era necesario pedir una declarativa de certeza al Poder Judicial para que informen si él podía participar de la sesión o no.