A través del decreto 533/2023, el Gobierno nacional promulgó este martes la nueva ley de alquileres con la cual los contratos entre propietarios e inquilinos se mantendrán por tres años y tendrán una actualización semestral, en lugar de anual como establecía la actual norma.
Para la actualización de precios se aplica el índice de Casa Propia: la medición del menor índice entre el Coeficiente de Variación Salarial (CVS) y el Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER).
Si bien desde las agrupaciones de inquilinos ven positiva a la nueva Ley, desde el sector inmobiliario, no.
“La ley no es beneficiosa. Al no haber rentabilidad nadie pone dinero. Hubo una jugada política y cuando gana la política pierda la población”, dijo Sergio Arroqui, integrante del colegio de martilleros, por Radio Provincia Ushuaia.
Y agregó: “Han llevado a una ley que la actualización semestral está por debajo de lo que actualizaba el ICL (Índice para Contratos de Locación). En este contexto la actualización era muy mala porque hacía que no hubiese propiedades disponibles en el mercado. El índice de Casa Propia está por debajo del ICL”.
“Cuando no tenés beneficios para el oferente no hay para el demandante. Nadie va a poner una vivienda a disponibilidad para ir a pérdida. Están golpeando al que genera las viviendas”, afirmó.
“Tratamos de defender a ambas partes, pero los mismos inquilinos están pidiendo ir fuera de la ley para conseguir alguna propiedad. “Esto debería derogarse lo antes posible”, concluyó.