Desde el año 2019 docentes investigadores del Instituto de Ciencias Polares y Ambiente (ICPA) de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego (UNTDF) trabajan en un proyecto local enmarcado dentro del Programa Nacional Argentina contra el Hambre-MINCYT junto al INTA Tierra del Fuego, la Secretaría de Ciencia y Tecnología, y la Secretaría de Desarrollo Productivo TDF.
La producción de hortalizas en la isla enfrenta fuertes desafíos climáticos, edáficos, culturales y técnicos que resultan en una producción principalmente de escala familiar para autoconsumo y en menor medida de mediana escala. Existe una gran dependencia de la importación de alimentos frescos que incrementa el costo y disminuye la calidad y el acceso igualitario de los habitantes. Además, el cultivo en invernáculos, una de las principales formas de cultivo en la isla, propicia la aparición de diversas enfermedades fúngicas como la pudrición gris causada por el patógeno fúngico Botrytis sp.
Bajo el título: “Desarrollo de bioinsumos locales para el fortalecimiento de la producción hortícola agroecológica de la Isla Grande de Tierra del Fuego”, el proyecto de investigación encabezado por la Dra. Paulina Moya y el Dr. Cristian Carrión, apunta a desarrollar un producto biológico con cepas locales del hongo Trichoderma sp. La finalidad de este bioproducto es que pueda ser utilizado como estimulador del crecimiento vegetal y como agente de biocontrol de enfermedades en cultivos hortícolas.
Para llevarlo a cabo se diagramaron distintas etapas. La primera consistió en el muestreo de suelo y aislamiento en laboratorio de cepas fúngicas de diferentes invernáculos de establecimientos productivos de Río grande y Ushuaia. Además, en ensayos de laboratorio, se evaluó la respuesta de las distintas cepas locales de Trichoderma sp. frente al principal patógeno fúngico encontrado en cultivos de lechuga, agente causal de la pudrición gris. La segunda etapa consistió en la preparación de ensayos en plantas de lechuga, en invernaderos del INTA-AER (Agencia de Extensión Rural) Ushuaia, con el fin de evaluar el potencial de las cepas locales de Trichoderma spp. previamente seleccionadas, por sus propiedades como agentes de control biológico y promotoras del crecimiento vegetal.
Este proyecto aún continúa en desarrollo, pero los resultados obtenidos hasta el momento son promisorios.Además de docentes investigadores, también participan en este proyecto dos estudiantes del ICPA dedicadas a prácticas de investigación y una estudiante becaria, beca CYT “Gestión Innovadora 2022”, otorgada por la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la provincia, dedicada a tareas de difusión y divulgación dentro de esta línea de investigación. Resulta necesario mencionar la importancia del trabajo en conjunto con estudiantes, docentes, entre las diferentes instituciones y el sector productivo, ya que el intercambio de saberes y experiencias enriquecen este proyecto de investigación.
Se plantea a futuro seguir probando estas cepas fúngicas en otros cultivos y evaluar sus posibles beneficios. Una vez obtenido el bioinsumo, se espera mejorar las condiciones de los sistemas agroecológicos de producción, y, por consiguiente, incrementar el rendimiento y calidad de los cultivos hortícolas de producción local.