La Dra. Dalila Nora, abogada que representa a Liliana Ibañez y Sandra Aballay, las dos trabajadoras que denunciaron haber sido víctimas de maltrato y acoso laboral por parte de personal jerárquico del Instituto Provincial de la Vivienda y Hábitat, se refirió al cambio en la presidencia de dicho instituto y la implicancia que podría tener en la situación de las trabajadoras, quienes aún se encuentran con licencia psiquiátrica y esperando resolver su situación.
Nora comenzó señalando que “precisamente estábamos esperando, por estos días, que la presidenta saliente se expidiera respecto del sumario que se le viene realizando a uno de los agentes que es el señor (Horacio) Alonso”, dijo respecto de las actuaciones que se iniciaron a una de las personas apuntadas como posibles responsables del acoso laboral contra Ibañez y Aballay.
Luego indicó la abogada que “el dictamen ya estaba listo, el pedido de sanciones estaba planteado en ese dictamen y justamente, al momento de tener que tomar una determinación y firmar, se resuelve esto. A nosotros, la verdad es que nos sorprendió y lamentamos que se haya retirado (la expresidenta Leticia Hernández) sin haber firmado las sanciones”, indicó Dalila Nora.
Después expresó que “lo que nosotros esperamos es que la presidenta entrante firme las sanciones que le corresponden al señor Alonso y que arbitre las medidas necesarias para desintoxicar el ambiente laboral que hoy existe, en el Instituto Provincial de la Vivienda”, reclamó la letrada. En el mismo sentido, comentó que “lamentablemente se tomó esta medida y Hernández no firmó las sanciones, ahora esperamos que (Laura) Monte firme”, mencionó, respecto de quien fue designada por el gobernador, Gustavo Melella, como nueva presidenta del IPVyH.
Por otra parte, la representante legal de las trabajadoras reclamó conocer “cuál es el protocolo que van a activar dentro del Instituto, para mejorar la situación laboral no solamente de Sandra y de Liliana, sino de todos los trabajadores que estaban siendo acosados por la presidenta que se retira. Porque las situaciones de violencia no van a mejorar de la noche a la mañana, hay que sanear el ambiente laboral y hay que trabajar en ese saneamiento”.
“Las trabajadoras hostigadas no van a mejorar de la noche a la mañana, ni se van a sentir mejor porque separaron del cargo a Leticia (Hernández), el daño que han hecho es terrible y esto, lamentablemente, afecta seriamente la situación. Ahora, esperamos que la situación mejore dentro del IPV, que los hechos de violencia cesen –no solamente para los trabajadores, sino también para algunos adjudicatarios- porque hay muchas cosas para mejorar y esperamos que este cambio en la gestión venga con aires renovados”, expresó.
Para concluir, al ser consultada sobre la situación de Liliana Ibañez y Sandra Aballay, comentó que “es triste, porque desde el Instituto nadie se solidarizó con ellas, excepto algunos trabajadores. Lejos de sancionar muchos fueron premiados con cargos, el gobernador recibió los mensajes de las trabajadoras pero no contestó. La verdad es que desconozco los motivos, pero a veces uno espera una respuesta del gobernador y, en este caso, no se dio. Pero lo más triste es que, en vez de poner paños de agua fría, las gestiones que se realizaron dentro del Instituto violentaron aún más la situación”.
“Por eso es que se cerró la vía del diálogo en el Ministerio de Trabajo, se le dio curso al expediente administrativo –que en definitiva nos terminó dando la razón- se le dio curso a la instancia penal, donde se determinó una prohibición de acercamiento por tiempo indeterminado y ahora, una vez que terminemos con todo esto, vamos por las acciones judiciales que corresponden e este tipo de casos, que son por daños y perjuicios. Y más allá que Leticia Hernández haya sido separada del cargo, las acciones van a ser extendidas a ella también”, advirtió finalmente la abogada. (Desde las Bases)