Es enfermero y fue elegido por las autoridades de la OSEF para ocupar el lugar de María Teresa Cavalloni, quien era la delegada de la Obra Social en Río Grande.
“Me toca poner la impronta propia, vengo de la salud. Y es interesante que se hayan fijado en mí, porque las obras sociales, sino están de la mano de salud, no van a funcionar”, advirtió Svetlitze por FM Del Pueblo.
“Estos cambios están llegando en la gestión nueva. No son cambios fáciles ni rápidos, pero hoy se están haciendo”, aseguró.
Y dijo que está dispuesto a atender a todos “en la primera oficina que está subiendo la escalera y que no tiene puertas, estoy de 8 a 16. Ya recibí a muchísima gente”.
El nuevo delegado se refirió al atraso que se ve desde el lado del afiliado, y afirmó que “los procesos administrativos de cada situación hay que explicárselas a la gente. A veces, muchas veces la gente no se va conforme con lo que le explican. Yo mismo he bajado a evitar que la persona que tiene una necesidad empiece a sentirse que la maltratan. Porque la persona que le dice lo que tiene que hacer es muy correcta, pero el afiliado piensa otra cosa. He visto gente que llora porque dice que la trataron mal y ví que no fue así”.
“Si las dos personas que están en la mesa de entrada se toman el tiempo que me tomo yo, va a haber más quejas. Esas personas hacen una explosión sentimental y uno tiene que tomarse el tiempo para escucharla. Veo mucha impaciencia en la gente y uno la puede comprender, porque la emergencia es la propia. Pero vamos de a poquito dando la cara. Voy a hacer lo mejor para que esto sea solucionado”, concluyó.
